Género: Yaoi
Capitulo: 1
Grupo: BTS
Pareja: V x J-Hope
Título: "Broken Heart"
Narra Ho Seok:
Las lágrimas inundaron mis ojos, noté mis piernas temblar y agaché la mirada mientras oía las ultimas palabras del hombre...
----------------------------------------------------------------------------
:Flash Back:
Bebí una vez más de aquella lata de cerveza, ¿cual era? ¿La quinta? ¿Octava? Ya había perdido la cuenta de la cantidad de veces en que lo llamé a su celular.
El lugar parecía llenarse cada vez más de gente y la garganta se me llenaba por un gran nudo.
-J-Hobi~- me llamó y dejé de tomar, mi corazón dió grandes brincos de felicidad.
Noté sus cálidos brazos rodearme y disfruté de aquel pequeño roce como nunca antes. Era mi propia promesa, disfrutar de cada momento a su lado, de cada roce, de cada mirada, de cada una de sus sonrisas.
Me mordí las mejillas por dentro y me dejé hacer entre sus brazos.
Mi felicidad, él era mi felicidad.
-Quiero pedirte un favor, ¿si?- preguntó Taehyung.
-Sabes que puedes contar conmigo siempre. ¿Que necesitas, TaeTae?- pregunté y él se sentó a mi lado adueñándose de mi lata de cerveza, bebiendo de ella.
-Necesito que me ayudes a elegir un traje- se sonrió, como solo él sabía hacerlo.
-¿Se puede saber para que?- pregunté, apoyando mi cien sobre los nudillos de mi mano izquierda.
-Ya lo verás, solo ayúdame. ¿Mañana te paso a buscar?-
Yo asentí y ví nuestras vidas pasar en mi cabeza. Me pasaba cada vez que conversábamos, cada vez que lo veía.
Nos habíamos conocidos hacía ya unos muchos años, nos conocíamos tanto que tan solo con alguna mirada, nos entendíamos.
Y es que, ¿existe peor pecado que estar enamorado por más de 10 años de tu mejor amigo? Seguramente, no había peor tragedia en el amor, al menos, no había peor tragedia para mi.
Mi corazón simplemente mandó sobre mi razón, pero, mi razón actuó al tomar la decisión de guardar cada uno de mis sentimientos bajo llave, una llave que se extravió y que justamente, yacía en las manos de mi mejor amigo, Kim Taehyung.
Me contó de él, de sus últimas semanas de trabajo, de sus proximos proyectos, de cada mínimo detalle. Aunque, tambien noté un brillo oculto en su mirada, algo que me estaba ocultando y que me dejaba totalmente intranquilo.
Aquella noche nos la pasamos de pláticas y bromas. Yo realmente disfrutaba de su compañía, después de todo, era mi mejor amigo.
Pasadas las tres de la madrugada, nos despedimos con el abrazo de siempre y su típica sonrisa. Aquella noche, me abrazó un poco más fuerte de lo común...
-Gracias, HoSeok Hyung- dijo y pronto se alejó, caminando con lentitud, entre la gente.
"¿Que fué eso?" pensé, antes de encaminarme a parada de bus.
Al día siguiente, me levanté más temprano de lo común.
¿Que era lo que tanto tenía que mostrarme?
Me preparé un poco de café y tras mirarme en el espejo mil veces, oí el timbre sonar con desesperación y supe que era él, solo Taehyung mantenía el índice presionando el timbre por más de treinta segundos.
-¿Eres idiota acaso?- pregunté abriendo la puerta exasperado ante el incesante pitido.
El chico me regalo una de esas sonrisas de niño pícaro en el cuerpo de un chico de veintisiete.
-Lo siento hyung, pero estoy apurado, asi que muevete, muevete~~~- pidió, tomandome la mano y llevandome consigo.
Cerré mi departamento y seguí sus frenéticos pasos.
No tenía idea de a donde me dirigía, lo unico que tenía por seguro era que, no podía estar más sonrojado.
Su piel era tan suave y cálida.
Pronto, estabamos frente a las puertas giratorias de un local de ropa.
En las grandes vidrieras elegantes maniquíes.
-¿Por que...- comencé a preguntar antes de que viera una sonrisa suya.
-Solo toma lo que gustes, te lo regalaré hyung- se sonrió el chico y entramos juntos a la tienda.
Lo miré extrañado.
-No quiero que mi dongsaeng me compre nada, prefiero comprartelo yo a ti, Tae- dije, mirando los elegantes trajes de etiqueta.
Tae marcó un increíble puchero en sus labios, mirandome como solo él sabía hacerlo. Era la inocencia en persona.
-Aish, esta bien- dije y esperé su sonrisa.
Dios Mio... moriría, moriría.
Me encaminé a los modelos, noté la mirada de Taehyung sobre mi. Tomé uno de los tantos modelos y elegí el más sobrio.
-Hyung, ve a probártelo, mientras tanto, buscaré el mío- se sonrió, empujandome dentro de uno de los probadores.
Lo miré extrañado antes de que se fuera.
Me puse los pantalones negros, la camisa blanca, la chaqueta negra, los zapatos y en cuanto comencé a ponerme la corbata, oí su voz.
-Ho Seokkie Apúrate-
Con una sonrisa en los labios salí del probador y levanté la mirada, mirándolo, quedandome colgado con su elegancia.
-¿Me queda bien?- preguntó y tuve que tragarme el enorme nudo que se formaba en mi garganta.
Pronto, cuando fuí a contestar palabra alguna, una chica apareció en mi campo visual, miró a Tae y le sonrió antes de girarse hacia mi, dejando una leve reverencia. Taehyung la abrazó por la cintura...
-Ella es Joo Hyun, mi novia- aclaró el chico, mordiendose los labios, visiblemente emocionado.
Miré la mano que me extendía la chica y su sonrisa.
Demoré unos segundos en caer en cuenta de lo que estaba ocurriendo frente a mi. Noté mi ceño fruncirse levemente y con una falsa sonrisa y los ojos ardiendo, acepté la mano de la chica.
-Puede llamarme Irene si gusta- aclaró ella y yo asentí en silencio.
-Así de que esto se trataba...- dije, con un intento de sonrisa.
Taehyung e Irene se sonrieron y se abrazaron con ternura.
-¿Ya se lo has dicho?- preguntó Irene.
-¿Decirme que?- pregunté, aguantando las lágrimas.
Mi dongsaeng se acercó a mi y pasó su brazo sobre mis hombros.
-¿Serías el padrino de bodas?-
Y noté mi interior romperse, y noté mis ojos arder como nunca. Y mientras él vivía su mayor sueño, yo vivía mi peor pesadilla. ¿Había otro dolor más inmenso que ver a la persona que más amas... irse con otra?
Mi alma murió, mi corazón se detuvo...
-Si, claro. Sería un honor...- contesté, sonriendo como podía.
Taehyung me sonrió abiertamente y me abrazó con fuerza y cariño.
Por un segundo desee que nada fuese real, que con ese abrazo reuniera todas mis piezas.
-Gracias, hyung- dijo estrujándome entre sus brazos, separandose de mi con una gran sonrisa.
-Sabes que no tiene que agradecer, Tae- respondí y miré mi reloj de pulsera -Debo irme, aún tengo algunos asuntos en el estudio de grabacion-
Era mentira, pero necesitaba alejarme de él, alejarme de ella y... abandonarme a las lágrimas como cada día, hoy, más que nunca.
-Claro, gracias de nuevo- dijo Tae, sonriendome.
Yo me cambié rapidamente y me marché, sin más.
Me odiaba a mi mismo... Ahora era tarde, muy tarde.
Las semanas pasaron y cada vez se me hacía más dificil continuar.
-No puedes seguir así, simplemente no puedes Ho Seok- insistió Jimin, uno de los unicos que sabían que era todo lo que me ocurría.
-No es sencillo olvidar Jimin- respondí, anudandome la corbata.
-Lo sé, pero debes seguir tu vida, debes continuar...- pidió el chico, colocandose el saco.
Ambos nos dirigíamos a la boda, sin embargo, Jimin estaba más preocupado por mi que nunca. Yo no paraba de dejarme llevar por mis pensamientos. Me acomodé la corbata como pude y me miré a los ojos en mi reflejo.
-Siempre lo amarás... sé fuerte, no te desmorones- me dije a mi mismo y salí de mi departamento junto a Jimin que hablaba de temas triviales para distraerme.
Tardamos poco en llegar y percatarnos de cuanta gente había en la iglesia.
Buscamos a nuestros amigos entre la gente, y, al localizarlos, saludamos como de costumbre. La elegancia era lo primordial. Hasta YoonGi hyung estaba ahí, callado como siempre, pero estaba allí.
-¿Como estas Ho Seok?- preguntó JungKook, el menor del grupo y el más sensible.
-Bien... supongo- respondí, tomando una copa.
El chico me palmeó el hombro y abrazó a Jimin.
-¿Ya han visto al novio?- preguntó Nam Joon, acercandose al grupo.
Jin le dió un codazo y me miró, avergonzado ante la actitud de su pareja.
-Oh, lo siento... No te había visto Ho Seok...- dijo el de piel canela, tomando la mano de Jin por lo bajo.
El JiKook era totalmente opuesto al NamJin, los más jovenes eran mucho más efusivos mientras que los mayores, mostraban cierta timidez.
Dí un sorbo a mi bebida y me encaminé entre la gente, buscandolo.
"Insistes con hacerte daño a ti mismo, eres un estúpido Seok" pensé, maldiciéndome.
-¡Hyung!-
Me giré con temor sobre mis pies, notando mi corazón agitarse de sobre manera. El chico me abrazó fuerza.
-Creí que no vendrías- dijo, palmeandome el hombro.
Miré su sonrisa y sus brillantes ojos.
-¿Crees que me perdería la boda de mi mejor amigo?- pregunté sonriendole.
El rió y pronto, las campanadas nos dieron la señal de que era hora.
Antes de dejarlo ir, tomé su mano.
"¿Que haces?" me pregunté y agaché la mirada.
-¿Que pasa Ho Seok?- preguntó Tae.
Lo miré a los ojos y me quebré.
-Siempre estaré contigo, siempre. Siempre puedes contar conmigo, Taehyung. Realmente te agradezco por todo lo que me haz dado en estos años. Has sido mi amigo, mi compañero... y lo siento si alguna vez actué un poco raro- dejé fluir mis palabras. -Sé feliz-
El chico me miró extrañado pero aún asi se sonrió.
-Tu siempre estarás en un lugar de mi corazón, Hobbi, siempre- contestó.
Y lo ví marchar, con su traje color negro y su sonrisa de oreja a oreja.
Y se marchó, dejandome con el corazón hecho un lío de fragmentos.
-¿Nunca me recompondré, cierto?- me susurré a mi mismo antes de ver el vestido blanco de aquella chica y escuchar cada palabra del padre. Lloré en silencio, sintiendo como el peso de la realidad caía sobre mis hombros pero, con la tranquilidad de que él era feliz, aún si no era conmigo...
Fin ^^~
ajhdkjahskdjha <3
Mila ^^~
No hay comentarios:
Publicar un comentario