Romantic Oneshot: Mini Fic~ "Cuando recuerde" (NamJin) Cap. FINAL ^^~
'>

domingo, 22 de mayo de 2016

Mini Fic~ "Cuando recuerde" (NamJin) Cap. FINAL ^^~

Holaaaaaa



Género: Yaoi
Capitulo: 3 de 3
 Grupo:  BTS
Pareja: NamJoon x SeokJin
Título: "Cuando Recuerde"


Narra Jin:

         El viaje a casa fué silencioso. Miré por la ventanilla cada calle, cada luz, cada auto que pasaba a nuestro lado, más no podía evitar sentir mi corazón doler una y otra vez.
Al llegar, Nam Joon, con la mirada preocupada, intentó animarme, en vano. Me terminé durmiendo temprano tras una ducha.
Los meses pasaron y las heridas en mi no se desvanecían, al igual que los recuerdos y sueños recurrentes parecían aparecer en mi vida.
Y con los recuerdos, Kook y Nam Joon. Cada momento en el que había sufrido, mi mejor amigo había estado allí.
Muchas veces había despertado entre lágrimas y cada una de aquellas ocasiones, la mirada preocupada de Nam Joon era el unico que estaba allí, justo a mi lado, paciente...
Su paciencia, como todo tuvo un límite y se manifestó de una manera muy... sutil.
Aquel día había llegado del trabajo un poco más tarde, dejó sus zapatos en la entrada y entró directamente a la cocina, yo lo ví pasar de un lado hacia el otro a través del espejo frente a mi.
Me miré a los ojos y me lamenté de mi deplorable aspecto. Estaba en la lona, y nunca mejor dicho. Grandes ojeras, la espalda encorvada y realmente delgado. El cansancio se colgaba en mis hombros. Tenía los ojos hinchados.
No servía de nada intentar parecer fuerte, no lo era.
-Jin ¿Estas en c...- comenzó a decir antes de entrar a mi habitación. Me giré a mirarlo y las lágrimas resbalaban por mis mejillas.
El chico frente a mi apretó sus puños y dejó caer su maletin en la puerta, dió amplias zancadas y tomó mi rostro entre sus manos, secando mis lágrimas con la punta de sus pulgares.
-Nam Joon...- murmuré y aquel par de ojos marrones miraron los míos. Me mordí el labio inferior y atiné a abrazarlo, ocultando mi rostro en su cuello -Duele, duele demasiado- dije y sus manos se aferraron a mi cintura.
-No quiero volver a verte llorar, ¿Cuantas veces te he dicho que odio verte llorar?- susurró, sobre mi frente.
-Lo siento...- dije y noté su camisa embeberse en lágrimas.
-Jin...- llamó y yo me separé para mirarlo a los ojos -El que lo siente soy yo...-
-¿Por qué?- pregunté desconcertado.
-Por lo que estoy a punto de hacer-
Y de esa forma,  me besó en los labios.
Abrí mis ojos de par en par antes de cerrarlos completamente, disfrutando del cálido roce. Se separó de mi, avergonzado, con las mejillas rojas.
-Otra vez- pedí y volvimos a besarnos, rozando nuestros labios con ímpetu.
-De nuevo- susurré sobre su boca y nos fundimos en un beso aún más apasionado.
En ese instante recordé cada momento en el que estuvimos juntos, él siempre había estado allí, siempre a mi lado, siempre intentando levantarme el ánimo.
Lágrimas cayeron una vez más. Había sido un completo idiota al no percatarme de cada detalle suyo. Me aferré a su cuello y no fundimos en una danza de labios y pequeños gemidos roncos.
-Joon...- dije como un susurro sobre su boca en determinado instante.
El chico se separó de mi y me miró a los ojos.
-Vamos a la cama- pedí, avergonzado.
-¿Estas seguro? Aun puedo esperar por ti- dijo, aferrando su mano a la mía.
-Más seguro de lo que he estado alguna vez- respondí, dejando un pequeño beso sobre su mentón.
Tomados de la mano, me condujo por el largo pasillo a su habitación y una vez allí, cerró la puerta detrás de mi.
Me mordí el labio inferior, sabía exactamente que era lo que estaba a punto de suceder y no me oponía, al contrario, lo necesitaba, lo necesitaba a él en cada centímetro de mi piel.
Tomó mi cadera, atrayendome a él, besándome en los labios, delineandolos con su lengua. Entre abrí mi boca y comenzamos una pequeña lucha por saber quien llevaba el mando.
Me sentía torpe, avergonzado a más no poder. Me sentía frágil.
-SeokJin- susurró sobre la piel de mi cuello.
-NamJoon~- gemí cuando su húmeda lengua se paseo por aquella zona.
Sus manos quitaron mi camisa, desnudándome con lentitud.
-¿Tienes idea de cuanto he esperado por esto?- preguntó apoyando su frente en la mía, acariciando mi torso desnudo -¿De cuanto he querido tocarte?-
-No lo sé, y me lamento tanto de no haberme percatado de ti como algo más que mi amigo-  respondí, atreviendome a besar su cuello.
Sus dedos se sentían fríos sin embargo, por donde pasaba él, dejaba un camino de creciente calor sobre mi piel, y, sinceramente, ame esa sensación.
Sus labios se unieron a los míos y mis dedos retiraron su saco, me condujo a la cama, empujandome levemente, uniendo nuestras caderas, rozándonos por encima de la ropa. Gemí sin vergüenza contra su boca mientras me sentía caer sobre la cama.
Desprendí botón a botón su camisa mientras yo notaba sus labios, dientes y lengua, recorrer  mi torso, mordiendo con impetu la zona baja de mi ombligo.
Noté mi miembro apretar contra la tela de mis pantalones, era totalmente doloroso. El deseo me consumía y yo no podía más que gemir y suspirar ante sus caricias.
-Quítamelos, duele- pedí y oí una risa de su parte.
Desabrochó mi cinturón y mis pantalones, quitandomelos por completo, notando tambien el ligero aire frío de la habitación contratarse con mis humedecidos boxers.
Nam Joon se quitó la camisas y la dejó caer en algun punto de la habitación, posicionandose entre mis piernas.
-Ojalá pudieras verte ahora mismo, Jin- se mordió los labios, paseando sus dígitos por mis piernas, logrando de que me estremeciera ante su contacto. Me encantaba, lo adoraba...
-Joonie~- gemí cuando sus dedos rozaron mi miembro.
-Sigue llamandome asi- pidió, bajando mi boxer con sus dedos, arañando mi piel, calentandome de sobre manera.
Su derecha tomó mi eje y con movimientos suave, lo acarició. Un vaiven enloquecedor que me hizo ver las estrellas, aunque, ví el universo entero cuando sentí sus labios sobre la coronilla de mi miembro, apretando, chupando.
Mis dedos se enredaron en su cabello y me sentí desfallecer, comenzó un vaivén embriagador.
-Si sigues, me correré- advertí, lamiendome los labios.
El chico rió y volvió a colocarse a la altura de mi boca, besandome con parsimonia.
Ensalivó dos de sus dedos y comenzó a internarlo en mi interior con cierta delicadeza.
-¿Alguna vez haz sido pasivo?- preguntó sobre mi boca, con un tono totalmente ronco.
-En un par de ocasiones...- respondí, notando como la punta de su índice, comenzaba a golpear aquel punto en mi interior -Ahhh~-
Internó un segundo dedo, ensanchando mi entrada, logrando incomodarme un instante antes de arquearme por mero placer.
-Entra, entra ya- supliqué antes de ver su sonrisa y como se alejaba para terminar de desnudarse. Cuando pude divisar su miembro, sentí mi cuerpo estremecerse, era grande, más grande que yo... Y, en vez de sentir miedo por el próximo dolor, me sentí ansioso.
Tomó su miembro entre su mano y lo frotó con ímpetu contra mi entrada. Empujó levemente y poco a poco, se adentró en mi interior.
Noté mi respiración agitarse y mi cuerpo a punto de ebullición.
Se mantuvo quieto unos segundos, esperando, la mínima señal para comenzar con sus embestidas.
-Nam Joon- dije aún en tono de súplica -Márcame como tuyo-
Su mirada marron se cruzó con la mía antes de que, se inclinara hacia mi. Me besó en los labios y acalló mis gemidos cuando empezó a embestir.
Tras unos minutos de embestidas, logró darme en aquel punto, aquel punto dulce que me hacía ver las estrellas. Mis manos subieron por su cintura a sus hombros, arañando su espalda con suavidad, bajando por el centro de su espalda hasta sus caderas y  trasero...
-Ahí... Si... Ahí, más~- gemí y eché mi cabeza hacia atras, notando como besaba y mordía mi cuello.
-Te amo, te amo- repitió una y otra vez, moviendo con frenesí cu cuerpo contra el mío, marcándome como suyo.
El se vino primero,en mi interior, y yo, al sentir ese calor, me corrí con fuerza, entre su pecho y el mio.
Nam Joon se recostó a mi lado, mirando el techo, totalmente cansado y sudoroso.
El realmente me amaba, realmente me quería...
-Lo intentaré- dije, mirándolo.
Su mirada se encontró con la mía y me sentí como nunca antes me había sentido. Su cara mostró el asombro que seguro sentía, abrazandome con fuerza.
-Prometo que jamás te haré daño- dijo y yo lo abracé de vuelta, acurrucandome en su pecho para conciliar sueño.
Hasta el día de hoy estamos juntos, lo amo, amo a NamJoonie, amo cuan torpe y dulce es, amo cada detalle suyo.
No guardo rencor a Kook, al contrario, le agradezco, gracias a él, Joon está junto a mi.
Ahora, solo nos queda marcar memorias juntos, marcar recuerdos para no olvidarlo, para que la proxima vez que despierte en la camilla de un hospital, si es que sucede, su nombre esté grabado tanto en mis memorias como mi piel, y, que cuando recuerde, los ojos se me llenes de felicidad y dicha, al encontrarlo a mi lado.

Fin!

hjhaskjhdjksdf

GIF TIME:



No hay comentarios:

Publicar un comentario