Romantic Oneshot: Oneshot- "Un Milagro" (Kai x Fan)

Hola!!! Omg!!! Hoy estoy tan... como decirlo... emocionada... de nuevo gracias!! Como recompensa les traigo un nuevo shot :3 Hoy les dejo algo con una dinámica algo diferente XD asdasdsdas ♥

Género: Hetero Romanticon Amorfo (?):3
Capitulos: 1
Grupo: EXO
Pareja: Kai x Fan (Tú)
Título: "Un Milagro"

Narra un Narrador (?):

Porque el destino te tenía una sorpresa decidiste tomarte un tiempo para ti, así que te pusiste cómoda, lista para salir a correr.

En esa tarde agradable donde sol brillaba, el verde del parque era algo bello a la vista, con personas que iban y venían en aquel sendero que al igual que tú salieron de la rutinaria vida detrás de las paredes…

Acompañada por la soledad y con la esperanza de algún día todo cambie para ti y encuentres así la persona que guste de tu compañía.

Estabas corriendo y escuchando la música que mas te gustaba, con los auriculares y una botella de agua en tu mano, concentrada en la senda, que llevaba al centro del parque de la ciudad, con la copa de los árboles tan alta como el cielo, el sol con sus rayos cálidos colándose en las hojas más altas.

Estabas tan concentrada con la música en tus oídos, aquella música que alguna vez esperaste escuchar con la persona que ibas a encontrar algún día y sin pensar ese día había llegado.

No te diste cuenta de que aquella silueta alta y elegante se acercaba a ti, corriendo también como tú, con los auriculares en los oídos escuchando alguna melodía x.

De pronto sin querer, se te escapa de tu mano la botella de agua de tus manos y sin querer rueda en el suelo, parando justo al lado de sus pies, el se frena ante ti.

Quedaste sorprendida, sus ojos rasgados te miraban, su sonrisa amplia y el cabello oscuro que caía en su frente.

En cuanto pudiste levantar aquella botella del suelo le pediste disculpas diciéndole casi tartamudeando.

-Perdón, lo siento, se me resbaló de la mano con el movimiento al correr.-

-No es nada.-te contestó, y siguió corriendo por aquel sendero, el parque te parecía ahora más grande que nunca.

Quedaste mirando a aquel joven, tan alto. Nunca te había sucedido antes, tu vida era el trabajo y tú solamente, había pasado por tu cabeza algún día encontrar a alguien interesante, pero esto era solamente el comienzo de algo bonito.

Al otro día del accidental encuentro, fuiste a correr a la misma hora por el parque, porque tenías la esperanza de volverlo a encontrar como el día anterior.

Pero no habías tenido la misma suerte, seguías esperando que algo pasara en tu vida tan monótona.

Pasaron varios días, seguías yendo al parque, saliendo de tu trabajo por las tardes, para ir a correr, aquella tarde esperabas un milagro.

Ya no creías encontrarlo más, pero ese día el joven venía esta vez caminando por el parque con su mascota, un Gran Danés tan blanco como la luz del sol.

De pronto, aquel perro fue el causante del milagro que esperabas, salió corriendo tras un plato de frizby que el joven tan apuesto había lanzado, el viento suave que soplaba en ese momento hizo que se dirigiera a ti, quedaste mirando aquella imagen, lo tierno que se veía jugando con su mascota, como dije el perro fue el causante, se acercó a ti a alcanzar el juguete y cuando lo tenía en su gran boca salió corriendo en busca de su dueño.

Pero el chico miró a aquella joven que se encontraba sentada en la banca del parque, esa eras tú.

Se acercó a ti con una sonrisa tan agradable, que te hizo alegrar el corazón haciéndolo palpitar muy fuertemente, poniéndote nerviosa también, no querías que se diera cuenta, pero tus mejillas se sonrojaron en cuanto te hablo.

-Hola! Tú no eres la chica que corría el otro día por aquí – preguntó muy animado

Tú contestas muy tímidamente:

-Si, puede ser vengo siempre a este parque.

En ese momento la gran mascota se sienta a tu lado haciendo algo que no esperabas, con su cabeza en tu brazo pidiendo un gesto de cariño.

A ti te gustan los perros así que colocaste tu mano sobre su cabeza y lo acariciaste suavemente y le preguntaste al joven:

-Cómo es su nombre? -le aclaraste- a mí me gustan los perros.

Te miró sonriendo nuevamente y te contestó con voz amable:

-Se llama Duke.

-Hola Duke, que lindo eres! Dijiste tú sin dejar de acariciar al perro.

-Es amigable verdad? – preguntaste.

-Si lo es pero a veces se pone algo juguetón y como es tan grande resulta algo molesto y torpe – te dijo el.

Y así comenzó aquello, entre el joven y tú.

-Me presento, mi nombre es Kim Jong In, pero puedes llamarme Kai – extendiendo su mano.

-Yo me llamo… (TU NOMBRE) y le estrechaste su mano con una sonrisa algo tímida.

Conversaron un buen rato de muchas cosas hasta te invitó a jugar con su mascota que correteaba tras el frisby cada vez que se lo lanzaba.

Te había gustado la situación y aun más te gustó conocer a Kai, tan alto y elegante con sus ojos tan expresivos al hablar.

Sin querer te había empezado a atraer la apariencia de ese joven y sin darte cuenta el tiempo había pasado, ya estaba empezando a oscurecer, las luces del parque comenzaron a encenderse de a una.

Aquellos farolitos brillaban y el paisaje era adorable.

Decidiste marcharte a tu casa.

-Es tarde debo marcharme- le dices tú suavemente.

-Está bien, nos vemos mañana, fue un gusto conocerte – te dijo – y se marcho por aquel sendero ya iluminado en su totalidad.

Se veía bien aquel joven tan apuesto con la luz de los faroles del parque.

De pronto se dio vuelta y grito (TU NOMBRE)

-Hasta mañana! Y levanto una mano para saludarte.

Tú hiciste lo mismo levantaste tu mano para despedirte de él.

Te fuiste caminando por aquel lugar pero esta vez, sonreías, tu corazón estaba feliz, te sentías bien ese joven era lo que esperabas tal vez.

Al día siguiente todo pasaba muy lentamente ante tus ojos, la hora no pasaba mas, querías verlo nuevamente, deseabas llegar a tu casa de una vez y prepararte para ir al parque.

Cuando saliste de tu trabajo, fuiste muy rápida, te preparaste, saliste al parque en busca de ese muchacho .En cuanto llegaste, el estaba allí en el mismo lugar donde lo conociste, te estaba esperando con una sonrisa, estaba solo no había llevado a su mascota .Su sonrisa te hacia sentir alegría con solo verlo era suficiente pero verlo sonreír, se veía muy atractivo.

-Hola, como fue tu día hoy? –te pregunto en cuanto te acercabas

-Bien. Estuvo tan rutinario y tedioso como siempre, pero bien –le contestas tú, aunque no sentías eso, el día había sido muy largo para ti.

Fueron caminando por el parque, en silencio y de repente este silencio se rompe con una pregunta.

-Quieres acompañarme? Quiero mostrarte algo que te puede gustar. – te dice Kai con esa mirada dulce y tierna, que a ti te había puesto medio tonta.

-Si porque no – le contestas con una sonrisa

Te gustaban las sorpresas, te gustaba ver aquel chico tan animado a tu lado, caminando muy erguido y elegante, pensaste en aquel momento que todo aquello que estabas viviendo era un sueño, pero no, era realidad, esa realidad que esperaste tanto tiempo.

Siguieron caminando, de pronto Kai, coloca un extremo del auricular en tu oído derecho y el otro extremo en el suyo.

-Espero que te guste lo que suelo escuchar cuando salgo a caminar, lo suelo asociar con el paisaje y así el vacío que siento a veces es llenado como si fueran imágenes de una película – te dijo con una mirada especial, la que te dio tanta ternura.

Cuando comenzó aquella melodía en tu oído, te sorprendiste, la escuchabas, era la misma melodía que escuchabas tú, la misma que te hacía soñar, la que querías compartir con alguien.

Te paraste frente a Kai, el te miró con cara de sorpresa, comenzaste a sonreír y le dijiste

-De verdad no lo puedo creer, es la misma que escucho siempre cuando salgo a correr, parece que ya tenemos algunas cosas en común, además de recorrer el parque y el cariño por los perros.-

El te miró a los ojos y sonrío, tenía una expresión muy agradable, cada vez te gustaba más.

Continuaron caminando muy juntos para poder escuchar la melodía, para no tironear del fino cable y romperlo.

Así llegaron al gran lago artificial en donde las parejas comparten los pequeños botes de pareja.

Lo miraste y sonreíste una vez mas, habías querido tener una pequeña escena romántica alguna vez. Lo que no sabias era que esa era una de las tantas que ibas a tener.

Kai al verte con la cara de sorpresa y emoción a la vez, te toma la mano, todo un caballero el… y te invita a subir en uno de los botes que se encontraba en la orilla del lago.

La tarde era hermosa el sol ya estaba tímidamente ocultándose, en cuanto obscureció los faroles empezaron a encenderse, iluminando así la costa, dejando reflejos en el agua.

Miraste alrededor, “es el lugar de encuentro de muchas parejas”, fue lo que pensaste, eso te puso algo nerviosa por la situación.

Kai estaba frente a ti, te observaba en silencio, no te atrevías ni a mirarlo, pero sabías que te morías de ganas de hacerlo.

El silencio de ambos se rompió una vez más los dos rieron porque habían intentado hablar al mismo tiempo, queriendo cortar aquella situación, ambos se pusieron nerviosos, sus mejillas quedaron sonrojadas, él quiso disimular la situación haciendo caer el remo en el agua, tu te pusiste algo nerviosa, saltaste de tu lugar y trataste de alcanzar el remo, se miraron, se dejaron llevar, quedaron tan cerca uno del otro en aquel pequeño bote, así pudiste sentir su perfume.

Fue allí cuando Kai puso tu mano en su pecho queriendo tranquilizarte.

-No te preocupes, dejémonos llevar por la corriente, el bote quedara en la orilla. -te dice

Aquella acción de Kai te había sorprendido, no te importó mas nada , ni el bote ni el remo ni el agua todo te daba igual, tu solo querías estar a su lado .

La tarde había sido hermosa para los dos, cuando te acompañó a tu casa, su rostro estaba lleno de felicidad, tu te sentías llena de amor por el, fue inmediato tu amor por ese chico.

Se dejaron llevar una vez mas, en ese momento Kai no aguanto mas las ganas, te pregunta si puede besar tus labios. En cuanto fuiste a pronunciar un si, para poder contestar, el ya estaba tan cerca de tus labios, te dejaste llevar por tus sentimientos, dejaste que tus labios fueran besados por Kai , fue el beso mas hermoso que jamás te habían dado , solo sentiste que el mundo eran ustedes dos , no sabías si flotabas o tenias todavía los pies en la tierra .Todo se había suspendido en el tiempo .

Ya era tarde… el tiempo había volado, el día siguiente tenías que trabajar temprano, así que lo abrazaste muy fuerte le diste un beso muy dulce en sus labios, te despediste de él le dijiste hasta mañana y tras tu espalda cerraste la puerta.

Al día siguiente, tu realidad era otra… tenías que ir a tu trabajo, otra vez pero pensaste en ese momento que abriste tus ojos, hoy soy por fin feliz, encontré el amor.

En cuanto terminó la jornada de trabajo saliste rápidamente, a tu casa te preparaste y saliste nuevamente al parque de siempre, Kai te espera todos los días a la misma hora allí en el parque, ahora salen siempre a correr juntos, los dos mataron el mal de muchas personas, ese mal que se llama soledad y que afecta a muchas personas en este mundo tan frío.

Además se prometieron no estar en soledad el resto de sus vidas…también los acompaña muchas veces el culpable del amor que se tienen… Duke el causante del milagro.