Título: "En mi Eternidad"
Duración: ?
Episodio: 23
Pareja: Donghae x Fan
Apariciones: Lo verán a lo largo de la historia, aparecerán algunos nombres conocidos ^^
¡ADVERTENCIA! Se verán escenas violentas y lenguaje explicito.
Narra Donghae:
-Lo siento, lo siento tanto- dijo Wook, abrazandome.
Suspiré, al fin y al cabo, luego de mil y un explicaciones, los había perdonado. Eran mis amigos, aquel par siempre había estado conmigo en las buenas y en las malas.
-Entonces... ¿aceptas esta nueva vida?- me preguntó Hyuk secandose alguna traviesa lágrima a punto de escaparse.
-No lo sé, aún no he visto su mundo por completo. Es decir, ¿Porqué podemos beber de una sola persona? Lo veo bien pero, ¿Que pasa si no consigues encontrar a esa persona?- pregunté.
-Creo que es un poco más complicado que eso, cuando te suceda, lo entenderás. El primer síntoma es la constante sed- aclaró Hyuk, cruzandose de brazos.
-¿Sed constante?- repetí analizando las palabras...-¿Es normal sentirla cuando apenas hacen unas horas desde que desperté?.
-Por lo general, pasan unos cuantos siglos hasta que encuentras a esa persona. Si sientes constante sed, mi querido amigo, estas soberanamente jodido- sonrió Hyuk.
-¿Cual es tu sabor favorito, Hae?- me preguntó Wook.
-El chocolate- respondí, ruborizandome-Y se que hay alguien aquí que tiene ese aroma...-
Ambos se miraron y se sonrieron.
-En ese tema no podremos ayudarte, pero si en lo demás- agregó Hyukjae finalmente.
Ryeowook buscó en sus bolsillos y pronto me tendió un frasco con pastillas.
-Bebe 4 al día, dos por la mañana y 2 por la noche. Te ayudaran con lo de la sed- explicó y yo tomé el frasco, asintiendo.
El timbre sonó y con el, el aroma que me volvía loco.
La puerta se abrió y, por ella, solo se lograba divisar una mano en el suelo.
Me acerqué rápidamente y se me heló la sangre.
_______________ estaba tirada en la puerta del departamento, con los ojos cerrados e intentando respirar hondo.
-Ay Dios- dije y la tomé en brazos. Se sentía tan liviana, podía levantaría sin esfuerzo alguno. La notaba tan frágil contra mi pecho, tan pequeña.
-¿Que ha pasado?- preguntó IU, recien llegando.
Negué con la cabeza y noté una de las manos de la chica aferrarse a mi hombro, apretando apenas.
De su pecho salía, como si brotara, sangre. Justo a la altura del corazón. Y, en ese mismo sitio, un puñal.
-Debes quitarlo- susurró sobre mi cuello sin abrir los ojos aún.
-¿Estas segura?- pregunté en el mismo tono.
Asintió debilmente y, haciendo tripas corazón, su mano tomó la mía y tiró. Sus quejidos de dolor cada vez eran más bajos, apenas audibles.
-¿Quien te ha hecho esto?- preguntó IU, seria, muy seria.
-Loki...- contestó la chica antes de volver a cerrar los ojos -Llevame a mi recámara, Hae-
Miré a todos los presentes y me encaminé al cuarto. Al entrar a la habitación, cerré la puerta y miré la cama.
-¿Te recuesto?- le pregunté y ella negó apenas con la cabeza.
-Déjame descansar un poco aquí- contestó, apretando una vez más el hombro.
Tragué saliva, visiblemente nervioso, notaba su respiración en mi cuello, un aire tibio que apenas tenía fuerzas.
Me subí a la cama y, recostandome en la pared, dejé que se quedara allí, aferrada y más tranquila que nunca desde que la había conocido.
Su mano bajó del hombro al pecho, y con la palma abierta, la dirigió al corazón.
-¿Estas nervioso?- preguntó en un hilo de voz.
-Un poco- respondí sincero.
-Ya veo... Si te incomoda, dejame sobre la cama...- aclaró ella.
-Estoy bien- contesté.
Parecia una muñeca, las pestañas le rozaban los pómulos, tenía una nariz preciosa y la piel tan suave...
Bajé mi mirada y la camisa entre abierta, ruborizadome. Aunque, entre incomodidad y sonrojos, no pude evitar recordar sus palabras, el nombre de quien lo había hecho.
-¿Loki? ¿El mismo de Thor?- pregunté, intentando retomar la conversación. Entre el olor a chocolate dulzón y la visión del escote, me volvería loco.
-Algo así- contestó ella, quejandose de dolor -Dime si la herida cicatriza-
Volvi a tragar saliva , aparté un poco la camisa dejando a descubierto la herida.
-No pero... ¿Porque se carcome la carne?- pregunté, alarmado.
-El puñal tiene ponzoña- dió otra bocanada de aire.
-¿Que es eso?- pregunté, intentando de que pensara en otra cosa que no fuera dolor.
-Es un ácido, nos carcome la piel y la carne- respondió, enterrando las uñas en el hombro.
Sisee de dolor pero, me mantuve así, no quería incomodarla.
-Loki, fué quien me creó... Soy una de las primeras vampiresas- aclaró, intentando calmarse, aferrandose cada vez más a mi.
-¿Eres de las malas entonces?- bromee.
-Siempre fuí mala, guapo- contestó tapándose luego la boca. -Si digo disparates o los hago, no te asustes, es la ponzoña- dijo, ruborizada.
Asentí y le sonreí.
-Es como si estuvieras drogada- dije.
-Es más bien como si estuviera ebria- aclaró ella sintiendo una nueva puntada de dolor. -Dios hijo de...- siseó, mordiendose el labio inferior.
-¿Que puedo hacer para ayudarte?- pregunté y ella negó.
-Quedate así, conmigo- respondió, acurrucándose una vez más en el hueco de mi cuello y hombro.
Mi mano derecha dejó de tomarle las piernas y tomé una de sus manos. Ella rapidamente la entrelazó.
En aquel rincón tán intimo, me sentía bien con ella, en paz, tranqulizadoramente en paz. Aún estaba preocupado, por no ser cotilla, no quise preguntar más.
Su respiración fué apaciguándose y su herida, se cicatrizó lentamente.
-Esta mucho mejor- comenté y ella asintió en mi cuello, visiblemente agotada. Su cabello me hacía cosquillas.
-Hae...- me llamó, apartándose lo suficiente como para mirarme.
-Dime- musité.
-Gracias...- aclaró, acomodandose una vez más.
Sonreí sin poder evitarlo.
-Hae...- volvió a llamar, esta vez, quedandose en aquel rincon.
-¿Si?-
-Hueles de maravilla- agregó, más sincera que nunca.
Fin Cap 23
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Mila ^^~
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